Existen dos tipos de fresadoras en frío: compactas y grandes. Las principales diferencias entre ambas categorías se basan en el tamaño, su rendimiento y sus campos de aplicación. A continuación detallamos para qué es conveniente utilizar cada una de ellas.
Fresadoras compactas
Tienen un ancho de fresado de 300 a 600 mm. Se utilizan principalmente para trabajos de fresado pequeños y medianos. También se pueden combinar con fresadoras grandes para trabajos de revoque en carreteras y fresado de empalmes en obras de gran envergadura. Estos tipos de fresadoras son muy maniobrables y, por este motivo, resultan ideales para las obras con poco espacio disponible. Gracias a sus medidas compactas permiten trabajar con precisión, por ejemplo, a lo largo de muros de edificios o en torno a tapas de alcantarillas.
En la mayoría de las fresadoras compactas, el tambor de fresado está ubicado en la parte trasera, lo que permite acercarse marcha atrás a los obstáculos. La cinta transportadora de las modernas fresadoras en frío se puede desmontar de forma sencilla, lo que es muy útil en las obras muy angostas.
Los campos de uso más frecuentes de las fresadoras compactas son:
- Fresado a capas en obras pequeñas a medianas
- Fresado de empalmes
- Formación de bordes de fresado rectos como preparación para el extendido de asfalto
- Reparación de parcheo
- Despejar (limpiar) las tapas y pozos de alcantarillado
- Trabajos de fresado interior
- Eliminación por fresado de las marcas viales
- Extracción completa como preparación para obras de canalización
Grandes fresadoras
Su punto fuerte es el rendimiento en superficie, por eso se utilizan sobre todo en las grandes obras. Sus características predominantes son una potente monitorización, un ancho de trabajo entre 1.000 y 2.200 mm así como el rendimiento de extracción y la ejecución rápida de la renovación de la calzada. Son ideales para levantar el asfalto, el hormigón y las capas ligadas hidráulicamente, pero también para eliminar materiales sin ligazón en obras de grandes dimensiones como autopistas, carreteras nacionales o aeropuertos.
El tambor de fresado se encuentra entre las orugas y bajo el centro de gravedad de la máquina. Así puede alcanzar profundidades de fresado de hasta 350 mm. En estos tipos de fresadoras una cinta transportadora orientada hacia delante se encarga del transporte del material fresado. De esta forma, los camiones pueden avanzar hacia delante, de forma cómoda y segura, mientras se cargan.
Los campos de uso más usuales de las fresadoras grandes son:
- Fresado a capas en obras de grandes dimensiones (autopistas, carreteras urbanas, carreteras principales, aeropuertos, etc.)
- Extracción completa como preparación para obras de canalización o renovación integral
- Reparación de parcheado en grandes superficies
- Técnica de fresado
Para más información relacionada con este tema puedes leer nuestro post sobre fresado en frío y sus campos de utilización más comunes